La historia de los brandies de Jerez.
“Brandy de Jerez” es la bebida espirituosa obtenida a partir de aguardientes y destilados de vino que deben conservar las características organolépticas y componentes volátiles propios de la materia prima de la que proceden.

La zona de elaboración y envejecimiento de los brandies de Jerez está constituida exclusivamente por los términos municipales de Jerez de la Frontera, El Puerto de Santa María, y Sanlúcar de Barrameda en la provincia de Cádiz. La influencia del proceso de crianza de los vinos de Jerez, el sistema de envejecimiento conocido como de Criaderas y Soleras, otras particulares y tradicionales prácticas de elaboración, y las condiciones climáticas y de medio ambiente de su entorno, permiten la obtención de un producto de características propias y singulares.

Según las características de los aguardientes y destilados de vino y del proceso de elaboración y envejecimiento, se distinguen los siguientes tipos de “Brandy de Jerez”:

Brandy de Jerez “Solera”: Es el brandy envejecido por el sistema de Criaderas y Soleras con un tiempo de envejecimiento superior a seis meses.

Brandy de Jerez “Solera Reserva”: Es el brandy envejecido por el sistema de Criaderas y Soleras con un tiempo de envejecimiento superior a un año.

Brandy de Jerez “Solera Gran Reserva”: Es el brandy envejecido por el sistema de Criaderas y Soleras con un tiempo de envejecimiento superior a tres años.

Los brandies amparados por la Denominación “Brandy de Jerez” para su destino al consumo deberán tener una graduación alcohólica adquirida comprendida entre 36 y 45 % vol., y presentar las cualidades organolépticas de los mismos, especialmente en cuanto a color, aroma y sabor. El contenido en materias reductoras totales será como máximo de 35 gr/l.