Vino Tinto D.O. Ribera del Duero Crianza Pago de Breda 75 cl
La Ribera más pura en cada sorbo.
Vino Crianza Ribera Duero. Descubre la auténtica esencia del Tempranillo 100%, un vino que, sin duda, es un fiel reflejo de nuestra profunda pasión. Procede de una vendimia manual sumamente cuidadosa, donde, de hecho, seleccionamos las uvas de nuestros propios viñedos. Cada racimo es elegido con un mimo excepcional, lo cual representa un trabajo artesanal y verdaderamente dedicado. Es por ello que garantizamos siempre la máxima calidad en cada botella.
Las uvas, posteriormente, fermentan con una calma particular en los mismos depósitos de hormigón ancestrales que nos acompañan desde la fundación de la bodega en 1962. Estos depósitos, en consecuencia, no solo son el corazón de nuestra bodega, sino que también simbolizan nuestra larga historia y la rica tradición vinícola que hemos mantenido. Tras este proceso, el vino, por consiguiente, reposa y madura durante 12 meses en barricas, lo que, en definitiva, le aporta una complejidad y una elegancia verdaderamente únicas. El resultado final, por ende, es un vino excepcional con un carácter propio y distintivo.
Al servirlo, podrás observar su intenso rojo picota con ligeros tonos caoba, un color vibrante y, además, profundamente cautivador. En nariz, te envolverán, sin duda, las notas balsámicas frescas que se entrelazan armoniosamente con los aromas frutales. Destaca, de hecho, la fruta negra como la grosella, y percibirás, igualmente, sutiles toques de maderas aromáticas que recuerdan a la noble caoba. Este bouquet, en consecuencia, es complejo y seductor, invitándote de inmediato a la siguiente experiencia.
En boca, este vino es, ciertamente, carnoso, y su potencia, sin lugar a dudas, inconfundible, abarcando todo el paladar. Posee, asimismo, unos taninos muy equilibrados, que son sedosos y redondos, aportando una textura sumamente agradable. Su buen cuerpo es notable, llenando la boca con un sabor que perdura, y la persistencia en el paladar es, de hecho, prolongada, dejando un recuerdo duradero. Cada sorbo, por tanto, es un auténtico placer que invita a seguir disfrutando.
Este vino, más allá de ser una simple bebida, es, ante todo, un homenaje a la tradición y, en particular, te acerca la Ribera más pura. Es, en esencia, una parte intrínseca de nuestra historia, ya que procede de elaboraciones extremadamente cuidadas. Nuestros depósitos de hormigón son, consecuentemente, clave en este proceso, transportándonos directamente al corazón del Duero y, por ende, recordándonos los vinos originales que vieron nacer esta tierra. Queremos así, con cada botella, honrar a nuestros abuelos, a nuestros bisabuelos y a todos aquellos que nos precedieron, pues ellos son, sin duda, el alma de este proyecto.
Este Crianza es, además, muy versátil, siendo ideal para maridar con platos robustos. Combina perfectamente con carnes blancas y rojas a la brasa, realzando, por supuesto, los sabores de la carne. Es un compañero excepcional para platos de caza mayor, y va también muy bien con asados tradicionales y guisos de carne contundentes. Te recomendamos, asimismo, probarlo con carnes confitadas, y, por supuesto, acompaña divinamente tus embutidos favoritos. No olvides maridarlo con una selección de quesos curados y también con los semicurados. En definitiva, enriquece cualquier comida y, seguramente, será el centro de tu mesa.
Por todo lo anterior, te invitamos a tus amigos y familia a descorcharlo y disfrutar de una copa de historia. Es, en efecto, un vino que conecta generaciones y ofrece una experiencia verdaderamente inolvidable. Hazte con tu botella hoy mismo; no te arrepentirás de probarlo.